Tuesday, January 29, 2013

¡Apoyemos al Dr. Guillermo Moreno!


"La corrupción es causa directa de la pobreza de los pueblos y suele ser la razón principal de sus desgracias sociales".

Jorge González Moore (1974 -), Escritor Colombiano

No tengo el  honor de conocer personalmente al Dr. Guillermo Moreno, ni tampoco pertenezco a su Partido Alianza País, ni a ningún otro partido político.

Sin embargo, los dominicanos debemos reconocer en el Dr. Moreno a una persona que está cumpliendo con su deber como ciudadano y lo está haciendo de manera ejemplar, para tratar de poner fin a la impunidad y al robo descarado que los gobernantes y sus funcionarios hacen del dinero que pagamos por concepto de impuestos.

Debemos recordar que a principios de noviembre del 2012 el Dr. Moreno apoderó al Procurador General de la República de un sometimiento en contra de Leonel Fernández, Víctor Díaz Rúa y Félix Bautista. Contra el primero por haber admitido que usó fondos públicos para pagar “nominillas”, para financiar parte de la campaña electoral de Danilo Medina y para cubrir los costos de viajes cuyos fines consistían en la firma de acuerdos privados de Funglode, todo lo cual contribuyó al enorme déficit fiscal del 2012. Contra Díaz Rúa y Bautista por haber desarrollado esquemas de sobrevaluación y sobre-ejecución en la construcción de obras del Estado.  Lo que se solicitaba al Procurador General mediante este sometimiento era que diera inicio formal a la investigación de los hechos denunciados y que todo el país reconoce como una verdad.

Sin embargo, también recordamos que tan sólo una semana después, el Procurador General  desestimó la denuncia, indicando que no había elementos que comprometieran la responsabilidad penal de Fernández y señalando, además, que él sentía un gran respeto por Leonel Fernández, de quien dijo que “creó un trato profundamente humano, decente y respetuoso con las personas”.

Más que interpretar esa barbaridad jurídica como falta de carácter, voluntad y compromiso para enfrentar la corrupción y la impunidad, según dijo el Dr. Moreno que el Procurador General demostró, lo que éste evidenció fue su lealtad al Partido de la Liberación Dominicana y su total adhesión a Leonel Fernández y a su inmenso poder político. Para hacerlo, tuvo que llegar a la irresponsabilidad de incumplir con los deberes de su cargo.

En esta ocasión, el Dr. Moreno, luego de haber tenido acceso a un apreciable volumen de informaciones que constituyen pruebas fehacientes de otros de los tantos delitos cometidos por Leonel Fernández como Presidente de la República y a través de su Fundación, las ha utilizado para depositar en la Fiscalía del Distrito Nacional una denuncia-querella contra Fernández y Funglode por lavado de activos, entre otras violaciones al Código Procesal Penal. De acuerdo con el acto sometido por el Dr. Moreno, Fernández y Funglode recibían donaciones multimillonarias de empresas y contratistas mediante varias modalidades irregulares.

El Dr. Moreno expresa en la denuncia-querella que “Leonel Fernández, valiéndose de su condición de Presidente de la República y usando como instrumento a Funglode, puso bajo su dominio y disposición un considerable patrimonio económico que maneja en su propio provecho y que muchos de los recursos captados para esa Fundación antes del 16 de agosto del 2000 fueron colocados en una cuenta corriente personal en el Banco Intercontinental a nombre del señor Manuel Alexander Rodríguez Casado, la cual se alimentaba de los aportes de empresas favorecidas con obras del Gobierno”. Los depósitos se hacían mediante la compra en efectivo, por parte de un tercero, de un cheque de administración cuyo importe se acreditaba a la cuenta de Rodríguez Casado, lo cual impedía que la procedencia de los fondos fuese explícita y que se pudiera determinar el origen de los fondos recibidos.

Así mismo, la denuncia-querella establece que “el retorno de Fernández al poder en el 2004 le facilitó la recaudación de fondos extraordinarios y percibirlos para sus actividades personales por vía de un considerable tinglado de transacciones ilegales por montos multimillonarios a través de “compañías e interpósitas personas”. De igual modo, “Fernández captó para Funglode y en su provecho personal, importantes sumas de dinero por medio de contribuciones exigidas a personas y empresas favorecidas con contratos con el Estado Dominicano, así como sustanciales aportaciones de instituciones públicas que se convirtieron así en clientes y patrocinadores de las actividades promovidas por Funglode, utilizando para ello recursos del patrimonio público”.

El Dr. Moreno ha solicitado a la Fiscalía que abra una investigación profunda y seria y perseguir las sanciones estipuladas en las leyes del país, a fin de evitar toda forma de impunidad.

Como era de esperarse en este país de nuestros amores, por su primera denuncia el Dr. Moreno debió enfrentar todo tipo de calumnias, amenazas y el sometimiento ante la justicia por una supuesta malversación de fondos, carente de fundamento legal. No cabe ninguna duda de que en esta ocasión lloverán nuevamente los comentarios y acciones para restarle méritos personales y para anular la iniciativa legal que ha emprendido. Aunque parece probable que, no obstante todas las pruebas aportadas, esta última denuncia-querella sea también desestimada, debemos movilizarnos para que eso no suceda.

Es indudable que Leonel Fernández se aseguró, antes de dejar la Presidencia de la República, de convertirse en un individuo casi intocable por la justicia dominicana, ya que mantiene un control personal sobre el estamento judicial del país y sobre importantes sectores de la vida nacional, dejando el camino abierto para su retorno al poder en el 2016.

No obstante lo anterior, si la ciudadanía respalda al Dr. Moreno en sus esfuerzos para someter a Leonel Fernández a la justicia y lograr una sentencia condenatoria contra él, la República Dominicana se encauzaría hacia un nuevo rumbo de institucionalidad y desarrollo democrático y abriría las puertas para terminar con la impunidad que han mantenido los políticos luego de desfalcar al Estado Dominicano; es decir, a todos nosotros.

A pesar de que la atención de la población se ha desviado un poco de la denuncia-querella del Dr. Moreno debido a los conflictos y los escándalos del PRD que fundara Juan Bosch y que con tanta razón éste abandonó, la realidad es que el pueblo dominicano no debe dejar pasar esta oportunidad de oro para lograr la condena del político perverso que es Leonel Fernández. Nuestra atención debe centrarse en esta demanda legal.

Nuestro pueblo ha sido pasivo y apático, a pesar de todos los perjuicios que ha sufrido como resultado de las escandalosas maniobras de los gobernantes y funcionarios que hemos tenido en las últimas décadas. Este pueblo ha asumido, generalmente, una actitud de indiferencia ante esos acontecimientos y ha sido incapaz de levantarse, protestar y luchar por sus derechos. Tampoco ha reclamado, por las vías pertinentes, que el Gobierno cumpla con los deberes que le consagra la Constitución y revertir así los abusos y la corrupción rampante de quienes tienen la responsabilidad de dirigir los destinos del país.

Einstein dijo que “el mundo no está en peligro por las malas personas, sino por aquellas que permiten la maldad” y Ghandi expresó que “lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena”. Ghandi también manifestó que “mañana tal vez tengamos que sentarnos frente a nuestros hijos y decirles que fuimos derrotados. Pero no podremos mirarlos a los ojos y decirles que viven así porque no nos animamos a pelear”. Son verdades que ponen al desnudo la cobardía de aquellas personas que dejan completamente solos a quienes sí tienen la valentía de enfrentar amenazas y calumnias con tal de defender sus derechos y los de sus conciudadanos. 
 
El Dr. Moreno ha tenido esa valentía. Es en esa virtud que la tarea que ha emprendido debe merecer el respeto, la admiración y la solidaridad de todos nosotros, independientemente de nuestras simpatías políticas. Si esa tarea produce los resultados que él y la gente íntegra de este país esperan, en la política dominicana se habrá producido un cambio trascendente.

El éxito de la iniciativa del Dr. Moreno depende del apoyo masivo del pueblo consciente. Debe realizarse una movilización mayor que la que produjo para lograr el otorgamiento del 4% del PIB para la educación y mayor que las protestas contra el déficit fiscal, la impunidad y el aumento de impuestos. Sólo así tendrá lugar un hecho sin precedentes en la historia dominicana y se asestará un golpe contundente a la corrupción de estos políticos facinerosos que nos gobiernan.

Leonel Fernández fue un gobernante que se burló abiertamente del pueblo dominicano, a quien ha despreciado de manera reiterada. No es posible que lo dejemos salir triunfante de todas las irregularidades que cometió como Presidente y las que propició a sus subalternos. Mucho menos debemos permitirle tener posibilidades de volver al poder en el 2016.

A politicastros como él fue que se refirió nuestro único Padre de la Patria, Juan Pablo Duarte, cuando dijo: “Mientras no se escarmiente a los traidores como se debe, los buenos y verdaderos dominicanos serán siempre víctimas de sus maquinaciones”.

Por lo tanto, respaldemos masiva y militantemente al Dr. Moreno, porque hacerlo significa que habremos cumplido con nuestro deber de ciudadanos libres y de ser hijos de Dios, en una causa justa que sólo redunda en nuestro propio beneficio. 

2 comments:

Anonymous said...

Los dominicanos debemos ejercer con más frecuencia la solidaridad con las causas que creemos justas. Por encima de cualquier partidismo. Solo así podremos transformar el país en uno mejor.

En RDado said...

Hay que reconocer la justeza de los reclamos del Dr. Moreno. ¿Porqué la reacción popular tímida? Hay varias razones que lo explican. Deseo exponer dos, ambas históricas. La primera es la actitud de excepticismo, prevalente en la población, cuando una iniciativa es adelantada por un partido político. La gente honesta teme ser utilizada para fines politicos partidistas o a ser encasillada dentro de una parcela política en particular. La segunda, es que han sido demasiados los años en que hemos vivido dentro de la podredumbre. De una manera u otra, en un país pequeño como el nuestro, debido a la necesaria creación de vínculos, integrantes poderosos dentro de la clase media deben muchos favores a los políticos. La parte de la clase media que ha sido tan solo víctima del tráfico de influencia es la que tiene que encontrar nuevas vías para organizarse y proseguir con los esfuerzos que ha iniciado el Sr. Guillermo Moreno.